Antes de diseñar y construir cualquier proyecto de infraestructura, es necesario evaluar las condiciones del terreno. El estudio geotécnico sirve para identificar dichas condiciones, especialmente aquellas que deben tenerse en cuenta a la hora de diseñar los cimientos, las excavaciones y las obras de estabilización asociadas a estos proyectos. Es por ello que un conocimiento temprano de las condiciones del subsuelo puede resultar económico en el diseño y la construcción, evitando sobrecostes y retrasos, y minimizando el riesgo del proyecto.